Frida se pintó así misma no sólo en los lienzos, sino en la vida. Su legado y su leyenda hacen huella en el corazón de propios y extraños que ven en ella la honestidad de una vida que se volvió arte.

En el año 2010, cuando aún vivía en mi país natal: Venezuela, tuve la oportunidad de pertenecer a la Orquesta Sinfónica Nacional Infantil, compuesta por casi 150 músicos menores de 17 años provenientes de todos los estados del país. En ese entonces yo tenía 16 años y llevaba tocando la viola desde los 12. Mis cuatro años de experiencia no